Bueno, entremos en materia. Hoy vamos a tratar un extraño caso de abducción extraterrestre. Este incidente ocurrió en Mississippi Estados unidos, una noche del martes 11 de octubre de 1973.
La historia va más o menos así: habían dos hombres llamados Charles Hickson y Calvin Parker. Resulta que estos tipos trabajaban en un astillero en Mississippi. Además de trabajar juntos, obviamente los hombres eran amigos. Así que un día los dos amigos deciden salir a pescar al río Pascagoula.
Se supone que todo sería una velada tranquila. Una noche de pesca como muchas otras en la cual los dos compadres iban a disfrutar un rato ameno de pesca y camaradería, poco se iban a imaginar los dos hombres lo que les iba a ocurrir esa noche.
Aconteció entonces que los señores se encontraban en medio de su pesca cuando de repente, y según lo narraron posteriormente, una nave plateada de aproximadamente 10 metros de longitud bajo y se poso directamente encima de ellos, a unos cuantos metros de altura.
Los hombres describen a este artefacto como que emitía una luz azul y brillante y una especie de zumbido. Decían que esta cosa se quedo flotando inmóvil, cuando súbitamente, se abrió una compuerta y emergieron 3 seres extraños, los cuales también flotaban.
Tres seres con piel grisácea y arrugada, que poseían solamente un ojo y que tenían manos que parecían pinzas. Según la descripción de los testigos, estos seres nos recuerdan a los grises, que son los que normalmente aparecen en este tipo de secuestros.
No obstante, es interesante notar que solo tuvieran un solo ojo y manos en forma de pinza, pues los grises suelen tener 2 ojos y sus manos no son en forma de pinza.
Bueno volviendo al relato, el caso es que cuando los hombres divisaron estas aterradoras criaturas uno de ellos, el señor Parker, que por ese entonces tenía 19 años, cayó desmayado inmediatamente, por el gran susto. No era para menos, imagínate que harías tú si esto te pasara. ¿Cómo reaccionarias?
El otro hombre, Charles Hickson, tal vez un poco más valiente, logro mantenerse consiente y narro que los extraterrestres los abdujeron y los tenían inmovilizados boca arriba en una mesa. Aparentemente, fueron introducidos a la nave flotando.
El señor Hickson continua contando que estaban siendo examinados por una especie de ojo electrónico, me imagino que parecido al de la película «el viaje del navegante». Este ojo emitía un constante sonido mecánico todo el tiempo.
El señor Hickson contaba como este ojo los examinaba de pies a cabeza, como si los estuviera escaneando. Todo este procedimiento duro más o menos 20 minutos, según el testimonio del señor Hickson.
La cuestión es que después las cosas se tornan un poco borrosas, lo último que recuerda el señor Hikson es que se encontraban fuera de la nave, abandonados a la orilla del río. Hickson cuenta que encontró a Parker parado y con sus brazos apuntando hacia el cielo y gritando.
Abrumados y asustados, los hombres acudieron al sherriff del pueblo Fred Diamond, a quien le contaron todo lo sucedido. Obviamente, el sheriff y sus ayudantes no podían creer lo que estos hombres les estaban contando.
Pensaron que están ebrios o que se trataba de una simple broma perpetrada por los amigos si no fuera por un pequeño detalle: los hombres estaban aterrorizados y parecían estar diciendo la verdad.
La cuestión es que el caso llego a oídos de instancias más altas. Pues apenas se supo de esta historia, Allen Hynek, quien por ese entonces era presidente del departamento de astronomía de la universidad del noroeste voló desde Nueva York al lugar del incidente.
Es digno de mencionar que este señor Hynek ya había trabajado tiempo antes como un asesor para la fuerza aérea norteamericana en el tema de los ovnis. El señor Hynek no fue el único que se desplazó al lugar del suceso.
También llego proveniente desde los Ángeles el señor James Harder, un profesor de ingeniería civil de la universidad de california y también asesor de los fenómenos aéreos.
Este par de investigadores sometieron a estos hombres a muchas pruebas, entre las que se encontraba la hipnosis y el detector de mentiras.
Lo más interesante es que los resultados de las pruebas, de tanto la hipnosis como el detector de mentiras, concluyeron que los hombres estaban diciendo la verdad. Todo esto hace creer que, sea lo que fuere que estos hombres hayan visto y experimentado, debió haber sido una experiencia real.
Además, tengamos presente que los dos tipos estaban aterrorizados y no hacían otra cosa que rezar y rezar, según los relatos de los investigadores. Sea como sea, todo parece indicar que efectivamente estos hombres fueron víctimas de una abducción extraterrestre.
No es la primera en la historia, y probablemente no será la última. No creas que esto se trata de un caso aislado, pues las historias de abducciones se cuentan por centenares, tal vez millares. Lo cual le da aun más crédito y factibilidad al relato.
Es difícil decir si efectivamente el señor Parker y el señor Hickson fueron víctimas de una abducción extraterrestre. Lo que sí es cierto es que tenemos buenas razones para creerles. Pues piensen en esto: para empezar, ambos hombres pasaron las pruebas del polígrafo como ya dijimos.
No creas que es fácil engañar a esta máquina y sin embargo ambos hombres la pasaron. Además, también se les encontró que en los brazos de los hombres tenían un pinchazo, lo cual le da más peso a la historia.
De hecho, esta historia ha sido tan transcendental, que hasta hicieron un monumento histórico y han puesto una placa conmemorativa en el lugar de los hechos.
Otro detalle que hace creer que los hombres decían la verdad es este: los policías cuentan que les pusieron secretamente un micrófono para escuchar las conversaciones entre Parker y Hickson. La idea era escucharlos cuando estuvieran solos para que cayeran en la mentira. Sin embargo, esto nunca ocurrió. Por el contrario, los hombres estando solos simplemente se limitaban a hablar sobre lo sucedido y a mostrar que tan asustados estaban.
Otros datos que han salido recientemente a la luz pública, es que algunos testigos dijeron haber visto en la noche en cuestión, un objeto volador no identificado, que emitía luces azules y que subía y bajaba por el río Pascagoula.
Los testigos dijeron haber mantenido en secreto estos avistamientos por miedo al escarnio público.
En fin, muchos son los libros que se han escrito sobre este incidente. ¿Ustedes que creen, mis emprendedores de la felicidad? ¿Creen que este fue un caso de aducción real?
Bueno, mis emprendedores de la felicidad, espero que les haya gustado el artículo del día de hoy.
Como siempre, les ha hablado su amigo y servidor, Andrés Rueda. Recuerden que si se suscriben a mi página les regalaré mi libro «20 consejitos para ser feliz».
¡Les deseo un maravilloso día y hasta la próxima!